El escritor español Domingo Villar, uno de los grandes fenómenos de la novela negra con piezas, murió este miércoles. Tenía 51 años y se encontraba internado hace dos días tras sufrir un Accidente Cerebrovascular (ACV).

Nacido en Vigo en marzo de 1971, Villar fue uno de los escritores gallegos que más impactó en escena literaria policial, cuando en 2006 incursionó por primera vez en el género con "Ojos de agua", libro protagonizado por un inspector solitario llamado Leo Caldas, habitante en la ficción de su Galicia natal, que inmediatamente se convirtió en un bestseller un hoy va por su 23 edición.

Otro éxito del escritor fue "La playa de los ahogados", segunda entrega de la saga Caldas, que con su parsimonia narrativa y la complejidad de los sucesos lo consagró, en ese 2009, en la escena literaria policial internacional con más de 20 ediciones y una adaptación al cine del director Gerardo Herrero con Carmelo Gómez como Caldas, es policía que con cada caso traía más preguntas que respuestas.

Casado con Beatriz Lozano y padre de Tomás, Mauro y Antón, Villar se definía como "un pesimista alegre". Y el fin de lo que sería su celebrada trilogía llegó en 2013 con "El último barco", una novela de 712 páginas, más que las dos anteriores juntas.

Durante el aislamiento de la pandemia publicó un libro de relatos con linograbados que llamó "Algunos cuentos completos", escritos, dijo en su momento a la prensa, "para ser leídos a mis amigos, sin otra ambición que encontrar la sorpresa y la sonrisa.